El objetivo común de Maduro y Sánchez con sus mensajes de propaganda para idiotas

El socialismo es una estafa ideológica que consiste en convencer a millones de ilusos de que robará a los ricos para beneficiar a los pobres.

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El objetivo del socialismo y sus consecuencias

En realidad, el objetivo común de todos los socialistas es concentrar todo el poder posible en el Estado, con un poder político cada vez menos limitado y con menos contrapesos democráticos y sometiendo un cada vez mayor porcentaje de la riqueza al control de los políticos, algo que propicia la corrupción y genera economías cada vez menos competitivas a causa de la hiperregulación. El resultado siempre es el mismo: arruinar a países enteros y enriquecer a la corrupta casta socialista a costa de robar al pueblo. Hay muchos ejemplos de esto, pero hoy en día podemos citar dos muy claros a ambos lados del Océano Atlántico, dos ejemplos de socialistas sin escrúpulos y que creen que todo vale para satisfacer sus deseos y conseguir sus objetivos políticos.

La propaganda para idiotas de la dictadura socialista de Venezuela

En Sudamérica tenemos el caso de Venezuela, un país rico en petróleo y que ha sido arruinado por el régimen socialista de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, dos tiranos que se hicieron ricos robando a los venezolanos y sometiéndolos a una dictadura que incluso detiene a adolescentes por pedir libertad.

Hace unos días, Ian Miles Cheong publicaba en Twitter el vídeo que el régimen de Maduro está utilizando para atacar a Elon Musk por su defensa de la libertad de expresión, un ejemplo claro de propaganda para idiotas, que son los únicos que se pueden tragar una forma de demonizar al enemigo que recuerda mucho a las que usaban los nazis y los comunistas en Europa:

Venezuelan leader Nicolás Maduro depicts himself as a superhero in his series SúperBigote, which means SuperMustache in a battle with Elon Musk, whom he depicts as a disciple of Satan. He is completely out of his mind. pic.twitter.com/xp9aWFnTnP

— Ian Miles Cheong (@stillgray) August 29, 2024

El desastre económico del socialismo en España

A este lado del Atlántico, España es el caso actual más claro de las nefastas consecuencias del socialismo. Bajo el gobierno de coalición de Pedro Sánchez, que agrupa a socialistas y comunistas, España es el país de Europa con más tasa de paro. En 2023 España se convirtió en el país de Europa con más pobreza infantil, con un 26% de la población en riesgo de pobreza. Mientra ocurre esto en el plano económico, en el plano político Sánchez tienen como prioridad aferrarse al poder a cualquier precio, otorgando toda clase de concesiones a sus socios separatistas, a costa del resto de los españoles.

Un gobierno corrupto y que se sostiene otorgando privilegios a sus aliados

Una de las más recientes concesiones otorgadas por Sánchez a los separatistas fue otorgar la autonomía fiscal a Cataluña, una de las regiones de España. Ya se sabía desde hace semanas que esa medida obligará a subir los impuestos a las demás regiones españolas. Es decir, que las regiones más pobres pagarán más impuestos para privilegiar a una de las regiones más ricas, con el único fin de que Sánchez no pierda los apoyos que la mentienen en el poder.

Entre tanto, el gobierno socialista se ve salpicado por escándalos de corrupción que afectan al propio Sánchez y a su entorno personal. La reacción de su gobierno, al más puro estilo del socialismo venezolano, ha sido amenazar a los jueces y a los medios de comunicación que investigan esos escándalos. Todo ello -hay que decirlo- con el silencio cómplice de la Comisión Europa de Ursula von der Leyen, que encabeza una coalición con los socialistas.

La propaganda para idiotas de Pedro Sánchez

Como si la realidad no le importase ni lo más mínimo, ayer Sánchez se lanzó a hacer un nuevo espectáculo de autobombo, presumiendo de encabezar un "gobierno limpio" (en plena ola de escándalos de corrupción socialistas) y anunciando más impuestos para quienes más ahorros tienen, diciendo de ellos que "tienen en el banco el suficiente dinero para vivir cien vidas". Sánchez completó ese derroche de demagogia diciendo que "España será un país mejor" si tiene "más transporte público y menos Lamborghinis".

Lo que hizo Sánchez ayer no es nuevo: es la misma propaganda para idiotas con la que el socialismo se ha dedicado a robar a pueblos enteros, fomentando la envidia entre los que menos tienen para recibir su apoyo en sus políticas de saqueo fiscal, que al final acaban afectando a todo el mundo. Con ésta ya son 70 subidas de impuestos desde que Sánchez llegó al poder en 2018, un aumento de la presión fiscal con el que está saqueando a la clase media y está ahuyentando a los inversores que generan empleo y riqueza. Ésa es una de las causas de que España tenga una tasa de paro tan elevada.

Una mezcla de idiotez, fanatismo e interés personal

Obviamente, ningún dato económico convencerá a los que insisten en seguir votando a los socialistas, a pesar de haber llevado ya tres veces a España a la ruina en las últimas décadas (con Felipe González, con José Luis Rodríguez Zapatero y ahora con Pedro Sánchez). La propaganda socialista toma a sus votantes por idiotas, y seguramente no se equivoca en muchos casos al sostener esa idea.

Pero sin descartar que haya un importante porcentaje de idiotas, hay muchos votantes socialistas que no piensan en cambiar su voto por fanataismo, porque son inmunes a los hechos y tienen un cierto interés en ello. No les importa que la realidad haya demostrado innumerables veces el fracaso de las ruinosas recetas económicas socialistas. Quieren seguir teniendo la oportunidad de vivir a costa de los demás, a base de los subsidios que reparte la izquierda, aunque eso tenga como resultado una economía y una sociedad cada vez más degradada y más próxima a niveles propios del Tercer Mundo.

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Fotos: RTVE / Europa Press.