Un falso pacifismo y un falso patriotismo para favorecer a un invasor en un periódico en 1940

Elentir EN Mar 11·6·2024 · 17:57 1

Hay discursos aparentemente pacifistas que ocultan unas intenciones que no tienen absolutamente nada que ver con un deseo de paz.

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El pacto nazi-soviético y las órdenes de Moscú para favorecer a los agresores

En agosto de 1939, la Alemania nazi y la URSS firmaron el Pacto Ribbentrop-Molotov, que incluía un protocolo secreto por el que ambas dictaduras totalitarias se repartían Polonia, Lituania, Letonia, Estonia, Finlandia y dos regiones de Rumanía.

Ese pacto implicó una alianza de hecho entre el nazismo y el comunismo, hasta el punto de que Moscú emitió órdenes a los partidos comunistas para promover una oposición a cualquier intento de apoyar a los países agredidos apelando al pacifismo. El 9 de septiembre de 1939 Georgi Dimitrov, secretario general de la Internacional Comunista, escribió las siguientes órdenes:

"La estrategia de los partidos comunistas en todos los países en guerra en esta etapa de la guerra es oponerse a la guerra, exponer su carácter imperialista; donde haya diputados comunistas disponibles, votar en contra de los créditos de guerra, explicar a las masas que la guerra no les traerá más que adversidad y ruina".

El falso pacifismo comunista exhibido por un periódico del PCE

A la hora de seguir esas instrucciones, los partidos comunistas omitieron el hecho de que Alemania y la URSS iniciaron esa guerra y se dedicaron a culpar a Francia y al Reino Unido por salir en apoyo de Polonia, invadida por alemanes y soviéticos. Así pues, el falso pacifismo comunista no rechazaba realmenre la guerra, sino el apoyo al país que había sido invadido. No eran discursos auténticamente pacifistas, sino un intento por favorecer a los países agresores.

Como ya expliqué aquí hace años, el Partido Comunista de España (PCE) siguió esas instrucciones de Moscú justificando la invasión germanosoviética de Polonia y después apoyando la invasión soviética de Finlandia, iniciada el 30 de noviembre de 1939. En ambos casos, y siguiendo las consignas de la Internacional Comunista, el PCE demonizó a los países invadidos y a Francia y Reino Unido por apoyarles, pero no dirigió ni una sola crítica a los invasores: ni a la URSS ni tampoco a su aliada, la Alemania nazi. El 18 de febrero de 1940, tal día como hoy, el PCE publicó en México el primer número de su periódico España Popular (se puede descargar aquí) con este gran titular en su página 5:

Los comunistas apelaron al patriotismo para restar apoyos a la defensa de Francia

Con estas consignas, el PCE apelaba al pacifismo y al patriotismo para impedir toda ayuda o muestra de solidaridad con los países agredidos. Pero esas consignas no se limitaron a intentar restar posibles apoyos internacionales a Polonia y Finlandia. Como ya expliqué aquí, en ese periódico el PCE se dedicó a atacar a los exiliados españoles que querían combatir contra Hitler, que por entonces seguía siendo aliado de Stalin. Eso explica ese titular en letras grandes "¡Ni una gota de sangre española para la guerra imperialista!"

En la parte derecha de esa página, bajo el título "España y la contienda europea", el PCE criticaba a "jefes republicanos y los jefes socialistas", afirmando que "se han pasado con armas y bagajes al campo de la burguesía franco-inglesa, buscando de esta forma el camino de la reconciliación con Franco; es decir, de sumisión a Franco, si hemos de usar la expresión verdadera". Tres meses después, Alemania invadió Francia. Esta invasión no cambió los discursos del PCE ni del Partido Comunista Francés (PCF), que se dedicó a sabotear el esfuerzo bélico de su propio país contra los invasores.

La historia se repite con las agresiones contra Ucrania e Israel

Es curioso observar el asombroso parecido entre esas consignas comunistas de 1940 y algunos discursos de hoy, discursos que siguen apelando a un falso pacifismo y a un falso patriotismo para cortar toda ayuda a dos países agredidos, Ucrania e Israel, culpando de las guerras iniciadas por Rusia y por Hamás a los países que apoyan a los pueblos ucraniano e israelí en su derecho a defenderse.

Hay que decir que esos discursos no sólo llegan hoy desde la extrema izquierda, sino también desde el otro lado del mapa político, utilizando la carta del patriotismo para favorecer los intereses de Putin y de Hamás, es decir, de una Rusia que ha amenazado varias veces a Occidente con su armamento nuclear y de un terrorismo islamista que ya dirigido su ola de terror contra Occidente en varias ocasiones y asesinando a miles de personas. ¿Ese patriotismo que nos venden algunos consiste en pedirnos que no nos preocupemos por quienes amenazan nuestra paz y nuestra seguridad? Recordemos que al igual que Al Qaeda y el ISIS, Hamás pretende la instauración de un califato islámico mundial que conduciría a una masacre de cristianos y judíos.

Un engañoso 'antiglobalismo' que favorece los intereses del Kremlin

Por otra parte, en las redes sociales son ya frecuentes los mensajes acusando de "globalistas" y de malos patriotas a quienes apoyamos a Ucrania y a Israel. En septiembre de 2022 ya advertí aquí de la clase de polizones que se cuelan en el llamado "antiglobalismo" para favorecer los intereses del Kremlin. Ahora, con el mismo cinismo que el PCE en 1940, algunos demonizan el hecho de apoyar a Ucrania y a Israel igual que lo hicieron los comunistas entonces con quienes apoyaban a Polonia y a Finlandia. Ante el curioso parecido de lo que se publicó en aquel diario comunista y algunos discursos de hoy, cabe preguntarse: ¿la infame actitud de algunos se debe también a instrucciones de Moscú?